¡Una copa por el buen fútbol!

Después de una madrugada impensable para mí en vacaciones, a las cinco de la mañana hora colombiana, el Barcelona demostró el porque es declarado como el mejor club del mundo. Mi pupila futbolística y mi corazón “Culé”, se regocijaron con una demostración de lo que esta desapareciendo en el mundo futbolístico: El Fútbol Arte. Ronaldinho y su combo paseó y dió una clase de toque y fútbol ofensivo en Japón.

Antes del partido se pensaba que el América de México podría hacer un poco más ante los blugrana, pero la verdad los jugadores catalanes se inspiraron y no tuvieron problema a la hora de deshacerse de las águilas mexicanas. El América se paró con un planteamiento al mejor estilo de cualquiera de los dos finalistas del torneo colombiano, todos atrás y esperando sacar algo de un contragolpe; pero una vez más se demostró que el mejor remedio para sistemas así de cerrados es un juego ofensivo sin entrar en desesperaciones.

Aunque cualquier persona puede decir que con jugadores como los del Barcelona el sistema ofensivo es algo casi obligado, y que con individualidades como las del club catalán en cualquier momento se puede desequilibrar; también es cierto que el 90% del encuentro lo que se observo fue un trabajo táctico impecable y muy pocas individualidades. El triunfo se basó en un juego en equipo perfecto, donde hasta los delanteros pasan la línea del balón y al menos hacen sombra.

Me doy por bien servido por el banquete futbolero que vi esta madrugada, y estoy ansioso de ver la final entre el Internacional de Portoalegre y el Barcelona.

Por cierto, los equipos clasificados a la final del torneo colombiano son el Cúcuta y el Tolima, como era de esperarse. Para mi gusto algo justo, pero creo que va a ser una final de fútbol amarrete y defensivo. Espero que el espectáculo sea digno de una final y no como el hasta ahora ha venido ocurriendo hasta ahora, por lo que el Cúcuta mostró ayer no tiene nada que hacer ante el Tolima; esto no significa que el Tolima sea muy superior, sino que el equipo rojo y negro viene en una curva de rendimiento hacia abajo.

Un brindis por el buen fútbol, un brindis por el Barcelona, un brindis por Ronaldinho y un deseo de navidad: que reaparezca el fútbol arte y ofensivo, el alma del fútbol es el gol.

¡Salud!