Un trago amargo del colchonero

Atlético Madrid fue inofensivo y encima sufrió un gol sobre el final, para perder 1-0 ante Levante, en su debut en los 16vos de la Copa del Rey.

El Atlético de Madrid completó un decepcionante partido en su estreno esta temporada en la Copa del Rey, aprovechado por el Levante en los últimos minutos con un gol de Nino para dar un golpe a la eliminatoria y dejar contra las cuerdas a su rival, a la espera del duelo de vuelta en el Ciudad de Valencia.

El equipo rojiblanco, que apenas generó una jugada clara de gol, salvo disparos lejanos, naufragó ante el conjunto azulgrana, al que su colocación le bastó para frenar a su contrincante y para inclinar a su favor la eliminatoria en los instantes finales, cuando Nino convirtió el 1-0 tras el enésimo desajuste defensivo local.

El Atlético, al que el pasado sábado se le unió Mista en el parte de lesionados, apostó de nuevo por los tres medios centros, aunque con una variación por delante, José Manuel Jurado de media punta, por lo que dejó algo libres las bandas, donde el griego Giorgios Seitaridis y Mariano Pernía tuvieron casi todo el carril para ellos.

Atrás notó la ausencia de interiores en la primera parte, porque los hombres de banda valencianos hallaron espacios suficientes para intranquilizar a la zaga rojiblanca, entre la que los jugadores visitantes, por momentos, disfrutaron de excesiva permisividad defensiva cerca del área local.

El Atlético, en cambio, sólo tuvo el control del balón durante el primer cuarto de hora, pero sus opciones atacantes se limitaron a un puñado de disparos desde fuera del área de Pernía, Jurado, el portugués Maniche y Fernando Torres que encontraron la segura respuesta del argentino Pablo Cavallero, guardameta del Levante.

El conjunto valenciano tardó más en meterse en el partido. Sin sufrir en su colocada defensa, el equipo visitante no apareció por la meta rival hasta superados los primeros quince minutos, pero su inocencia en los últimos metros dejó sin efecto las buenas internadas del marfileño Olivier Kapo por la izquierda.

Sus centros confirmaron el equilibrio sobre el terreno de juego y avisaron del peligro del Levante, pero ni Carmelo, en un balón al segundo palo, ni Nino ni Riga, que desperdiciaron con dos remates fallidos consecutivos la mejor oportunidad azulgrana, aprovecharon las opciones de su equipo.

Bajo una intensa lluvia, ambos conjuntos se repartieron el dominio hasta el descanso entre el aburrimiento del poco público que acudió al estadio Vicente Calderón, al que asustó una intencionada falta de Kapo, despejada a córner con una ágil estirada de Leo Franco. El partido y las ocasiones ya pertenecían al Levante.

El mexicano Javier Aguirre rectificó su sistema en la reanudación, pasó a cuatro centrocampistas, con ya dos futbolistas en la banda, Juan Valera, que entró por Luccin en el descanso, en la derecha y Jurado en la izquierda, pero su equipo no ofreció sensaciones de mucha mejoría.

Una brillante combinación entre Fernando Torres y el argentino 'Kun' Agüero, con doble pared entre ambos jugadores, y culminada posteriormente con un tiro excesivamente cruzado de Valera fue el único síntoma de que el Atlético estaba vivo en los primeros minutos de la segunda parte.

El Levante necesitaba mucho menos para desbordar a la defensa local, como demostró en un disparo alto de Kapo o en varios inquietantes contragolpes, en los que el propio conjunto valenciano no se creyó capaz de tomar ventaja en la eliminatoria y en los que casi siempre chocó con la velocidad del colombiano Perea.
Entre la incapacidad del Atlético para superar a la defensa rival y el conformismo del Levante, los disparos lejanos aparecieron como las únicas vías ofensivas para ambos equipos, como ocurrió en dos tiros irrelevantes de Pernía y Jurado y otro mucho más amenazante de N'Diaye, que se perdió cerca de la escuadra de Leo Franco.

El Levante, sin embargo, no desaprovechó su siguiente ocasión, en una internada de Riga, cuyo disparo detuvo Leo Franco, que se rehizo para despejar el posterior taconazo de Kapo, pero que nada pudo hacer ante el colocado tiro de Nino. Fue el definitivo 0-1 a cuatro minutos de la conclusión y el castigo para el decepcionante duelo del Atlético.